Sinopsis

El acontecimiento más importante en la evangelización del Nuevo Mundo ocurrió en diciembre de 1531. En el transcurso de cuatro días, la Virgen María, bajo el título de Nuestra Señora de Guadalupe, se apareció a un indígena converso llamado Juan Diego. Como resultado de este encuentro, y la imagen milagrosamente impresa en la tilma (capa) de Juan Diego, nueve millones de nativos americanos abrazaron la fe católica, y las Américas comenzaron su transformación en "el hemisferio católico". El mensaje de amor de Nuestra Señora de Guadalupe había reemplazado la violencia institucionalizada de la cultura azteca y construido un puente entre dos mundos.